Las condiciones en las que realizas tu trabajo están cambiando a marchas forzadas en estos tiempos de emergencia sanitaria. Quizás por eso te estés planteando la idea de acudir a un espacio de co-working en Madrid. ¿Es así? Muchos ya lo están haciendo. Y si es este también tu caso, entonces no debes perderte las siguientes líneas.

El teletrabajo, ¿de opción a “obligación”?

Si en algo has podido notar los cambios en el modelo laboral generados por la situación actual, es en el auge que ha experimentado el teletrabajo.

De ser una demanda de los propios empleados, ahora las empresas comienzan a tomárselo en serio. Muchas están imponiéndolo como medida de seguridad laboral. Y aunque no son pocas las ventajas que esta modalidad de trabajo te ofrece, también existen una serie de desventajas que no deberías pasar por alto.

Por ejemplo, el teletrabajo favorece la conciliación y la flexibilidad, permitiéndote trabajar desde cualquier lugar. También supone un ahorro de tiempo en los desplazamientos, lo que a su vez conlleva un importante ahorro en gasolina y una disminución en el estrés derivado de las condiciones del tráfico en hora punta.

Sin embargo, puede ser también la causa de una peligrosa merma en tu motivación. La falta de contacto con tus compañeros y la ruptura de la barrera establecida entre las tres facetas de tu vida (trabajo, familia y ocio) puede hacerte enfrentar momentos muy complicados. Y todo ello se traducirá en una menor productividad e implicación.

Entonces, ¿cuál es la solución? El teletrabajo mixto.

Este sistema mixto combina el trabajo presencial y el remoto, permitiéndote sortear los inconvenientes y aprovechar los puntos fuertes de ambas modalidades. Pues sin renunciar a todas las ventajas enumeradas, también te ayuda a fortalecer las relaciones personales con otros trabajadores y con tus clientes, robusteciendo tu imagen comercial y tu autoestima.

No obstante, si eres trabajador por cuenta ajena, no tienes por qué esperar a que sea tu empresa la que decida por ti. También puedes implementarte tu “propio” sistema mixto si recurres a las bondades de un local de co-working.

Un espacio de co-working como solución para tus problemas

El teletrabajo produce cierta sensación de soledad. Pues bien, en un co-working vas a estar rodeado de otros co-workers como tú con quienes podrás establecer conversaciones distendidas para desconectar, estar al día de cómo funcionan sus propios negocios y, sobre todo, enriquecerte con sus conocimientos. Si esto te parece una gran ventaja, espera a escuchar lo mejor de todo: vas a poder contar con una flexibilidad máxima.

Un espacio de co-working puede adaptarse a la perfección a tus tiempos y necesidades. Porque no es lo mismo recibir a un solo cliente que a varios a la vez, ni tampoco es lo mismo trabajar con un compañero o con una docena de ellos. O quizás prefieras trabajar hasta tarde, o solamente por las noches, o recurrir a un espacio nada más que ocasionalmente. Y todas estas necesidades bien podrían cambiar en cuestión de semanas, e incluso días.

En ese sentido, puedes encontrar paquetes mensuales o por horas, disfrutar de espacios mayores o menores, salas de reuniones o despachos, en función de lo que tu negocio necesite en cada momento. Es decir, que invertirás el dinero justo para lo que ahora mismo te hace falta. Ni más, ni menos. Y todo ello con la comodidad de no tener que preocuparte de nada relacionado con el mantenimiento o la adecuación de los espacios.

Por lo tanto, tu mayor preocupación debe ser escoger aquel centro que mejor se adapte a tus necesidades.

¿Qué aspectos tener en cuenta a la hora de elegir el centro?

Lo primero que tienes que valorar es la localización. Y tienes que hacerlo desde varias perspectivas: la accesibilidad, la comodidad y la situación estratégica.

Como el tiempo es oro, puede carecer de sentido que tengas que desplazarte muy lejos de casa. No obstante, situarte en un barrio de referencia para tu sector (o para la ciudadanía en general) quizás impresione mucho a tus clientes e inversores. Lo ideal es que maximices ambas situaciones, y, si no es posible, que encuentres un punto medio.

También tienes que valorar las condiciones del contrato. Lo que estés dispuesto a pagar al mes es muy importante, pero también lo es examinar si los contratos te exigen permanencia. Principalmente si en tu negocio la movilidad es parte esencial.

Además, deberás comprobar la flexibilidad horaria del centro al que decidas acudir. Quizás necesites uno que te ofrezca la posibilidad de trabajar las 24 h de los siete días de la semana, o solo de lunes a viernes con un horario habitual.

Finalmente, tendrás que fijarte en el equipamiento disponible. Debes pensar qué vas a necesitar para el perfecto desarrollo de tu jornada. ¿Internet a alta velocidad? ¿Proyectores? ¿Puede que una cocina? ¿Salas de reuniones? ¿Valoras que alguien atienda tus llamadas y correspondencia? ¿Es importante para ti que te puedan dar un servicio integral donde se comprenda el servicio de asesoría, tramites administrativos…? ¿Te hace falta almacenar documentación? ¿Es importante para ti poder disponer de espacios al aire libre?

Un centro de negocios va más allá que un mero local de co-working

En cualquier caso, y sea lo que sea lo que priorices a la hora de escoger, recuerda que puedes llegar a sentir la necesidad de recurrir en cualquier momento a un espacio más personal e íntimo.

Trabajar junto con otras personas tiene sus ventajas. Pero, a veces, implica ruidos o escuchar constantes conversaciones que no te interesan. En definitiva: puede que eso te desconcentre.

Pues bien, ese es el principal punto diferencial que te ofrece un centro de negocios: tu propio espacio. Acceder a un lugar libre de ruidos en el que poder realizar tus labores sin interrupciones y de la manera más cómoda posible. Y, todo ello, sin renunciar a los beneficios de un centro de co-working. Además, estos centros prestan un servicio más personalizado e integral, en definitiva el foco se pone más en el servicio.

Es decir, que contarás con un servicio integral, capaz de adaptarse en todo momento a tus necesidades y al crecimiento de tu empresa, a la vez que disfrutarás de la presencia de otras personas para cuando necesites sociabilizar y relajarte.

Como ves, un centro de negocios te otorga todas sus ventajas particulares junto con las comodidades que te ofrece cualquier espacio de co-working en Madrid. Si quieres beneficiarte de todas estas sinergias, quizá sea el momento de que des el siguiente paso cuanto antes.